Fin del cuarto viaje a Senegal
30/05/2018
Fin del cuarto viaje a Senegal que la Fundación Antonio Cabré realizó con siete alumnos de 2º Bachillerato y tres profesores de LFG Bon Soleil.
Los alumnos: Elisabet Marina, Abril Milia, Alvaro De la Moras, Carlota López Zidalgo, Pau Montserrat, Olga Martínez Espuga, Alexia Regas. Profesores; Marion Hulle, Isabel Miernau y Juan Giménez.
En esta ocasión las profesoras han podido trabajar con los alumnos de CP de Mbackombel, el método de lectura utilizado en LFG Bon Soleil
La relación de nuestros alumnos de 2º de Bachillerato con los alumnos de la residencia Mbour ha tenido como resultado una excelente nivel de convivencia, realizando trabajos conjuntos.
Como novedades de este viaje, se ha realizado una visita al Orfanato donde hemos podido colaborar con los niños huérfanos de 0 a 18 meses. Nuestros alumnos realizaron un voluntariado asistiendo estos niños.
Hemos realizado un trabajo de colaboración con los integrantes del equipo de fútbol del Barrio donde está ubicada la residencia de estudiantes en Mbour.
Conclusiones por parte de los alumnos de 2º de Bachillerato que han participado en este viaje:
«Hemos vuelto hace unos días, este gran viaje nos ha hecho pensar… La pregunta que más
nos han hecho es ¿Qué os ha impactado, qué habéis aprendido? Seguimos impactados por
el choque entre dos culturas y continentes totalmente diferentes. Nada más llegar recibimos
una dosis de realidad. Nuestra situación aquí, en España es excepcional y totalmente
privilegiada.
Cada noche teníamos reuniones los 7 alumnos, Juan, Marion e Isabel. Abril iba escribiendo
en un diario mientras hablábamos sobre nuestras impresiones, lo que habíamos sentido
durante el día. Nos impresionó la precariedad de las construcciones muchas veces sin
acabar, la falta de higiene personal pero también la falta de mantenimiento y de cuidado
material. En Senegal vimos mucha diferencia: los hijos no están nada sobreprotegidos,
pueden trabajar, vender y criar cabras solo con 4 añitos. Visitamos la Pouponnière de
Mbour, orfanato que nos dejó destrozados. No fueron las condiciones en las que se
encontraban los bebés, fue cogerlos en brazos y ver cómo reclamaban cariño, dejarlos en
las cunas y verlos llorar.
La Fundación Antonio Cabré se focaliza, en su proyecto en Senegal, en dar apoyo a la
Fundación Por una Sonrisa en África de Mario y Asun. Ellos nos llevaron al colegio de
Mbackombel que ellos construyeron desde 0. Allí nuestros profesores llevan a cabo el
proyecto de lecto-escritura. Además, han construido varias aulas de Maternelle para pre-
escolar por en medio de la sabana. Pasamos también por el poblado de Louly Bentegne, la escuela de
secundaria bastante grande y la Maternité donde nos enseñaron sus técnicas de
planificación familiar y la sala de parto.
Fuimos a comprar cabras en el mercado de ganado, al mercado de pescado y al gran
puerto de Mbour: olores muy desagradables e imágenes fuertes para nosotros que estamos acostumbrados a controles sanitarios, medidas de seguridad, a sistema de recogida de
basura.
No solo te impacta la llegada en la que te ves envuelto por la magia de ese mundo, sino que
también te impacta la vuelta. Casi todos nosotros nos sentimos desplazados en nuestras
propias casas viendo que gran parte de lo que nos rodeaba era superfluo y totalmente
innecesario. En Senegal, vimos que somos capaces de vivir con mucho menos y ser igual o
más felices.»