¡Los alumnos que han viajado a Senegal nos explican su experiencia!

28/01/2023

Los alumnos que han viajado hasta Senegal nos explican su experiencia día a día. Cinco crónicas llenas de contrastes, de ilusión y de lágrimas.

CRÓNICA VIAJE SENEGAL – DÍA 1

Salimos de LIB Bon Soleil a las 12:00, 4 coches llenos de ilusión y ganas. Llegamos al aeropuerto del Prat y acto seguido, facturamos las cargadas bolsas de Ikea, pasamos el control de seguridad y fuimos a almorzar al McDonald. Se va acercando la hora del vuelo, a las 15:00. Pasamos el control de aduanas y nos dirigimos a la puerta E74.

El avión deslumbraba por los coloridos ropajes de los auxiliares de avión, anticipándonos a la belleza cultural del país que nos esperaba. Tras cinco largas horas de avión, de películas y mucha conversación, llegamos a nuestro esperado destino: el nuevo aeropuerto Blaise Magne, construido justo después del confinamiento.

Cogimos las maletas y las pasamos por un control, curioso a nuestro parecer. Mientras que los adultos hablaban con los agentes de seguridad, nosotros fuimos colocando las bolsas en los carros.

Salimos del aeropuerto y un cálido soplo de aire nos recordó que ya habíamos llegado a Senegal. Nos recibió con los brazos abiertos N’Gour, nuestro amigo y ayudante senegalés.

Llegamos a nuestro pequeño autobús. El trayecto duró más de una hora y, a pesar de la oscuridad de la noche, no pudimos despegar los ojos de la ventana.

Llegamos al Hotel Club Safari en M’bour, dejamos todo nuestro equipaje en las habitaciones, cenamos algo rápido y nos metimos en la cama, con el fin de descansar y recargar fuerzas para nuestro primer día en Senegal.

CRÓNICA VIAJE SENEGAL – DÍA 2

Nos levantamos ansiosos y vamos a desayunar a las 9:00. Un día muy intenso nos espera.

Preparamos nuestras bolsas y vamos hacia la Poupounière, un orfanato donde viven 97 niños y niñas de entre 0 a 7 años. Gracias a esta visita de reconocimiento, corta pero emotiva, nos familiarizamos con la situación que tendremos que vivir al día siguiente. Tenemos un primer contacto con el centro, saludamos a algunos de los pequeños y hacemos la entrega de material que habíamos preparado para ellos.

Una vez acabada esta visita, vamos a cambiar nuestro dinero y conoceremos de primera mano la vida de M’bour.

Sobre las 12:00 tenemos la oportunidad de visitar la escuela de Primaria de Louly, donde entregamos libros, conocemos a los alumnos y vemos las precarias instalaciones: el campo de fútbol y la pista de atletismo. Empezamos a ser conscientes de que los alumnos de esta escuela, pese a las evidentes dificultades, tienen muchas ganas de aprender.

Posteriormente, visitamos el centro de atención primaria de Louly. Entregamos los medicamentos solicitados y tenemos la suerte de conocer a una mujer que había dado a luz esa misma madrugada. 

En contraste con todo lo visto anteriormente, vamos al Ayuntamiento y nos reunimos con los funcionarios para proponer proyectos futuros de la Fundación Antonio Cabré. 

Más tarde, cogemos un autobús rumbo al campo de baloncesto. Ibrahim y sus chicos nos reciben con los brazos abiertos y con mucha ilusión. Tenemos la oportunidad de jugar un pequeño partido con las chicas del equipo. El equipo femenino es muy amigable y, desde el primer segundo, muestran un gran interés por jugar con nosotros.

Después del intenso partido bajo el sol abrasador nuestros profesores nos tienen preparada una sorpresa… Nos vienen a recoger en carros tirados por caballos, un medio de transporte local para ir al mercado de M’bour. 

Llegamos al corazón del pueblo y nos  adentramos por las  caóticas calles  llenas de especias, perlas y tejidos. Nos vamos adentrando lentamente. 

Llegamos a la zona portuaria, donde nos sorprende una espectacular escena en la orilla del mar, abarrotada de paradas ambulantes de pescado. Seguidamente, nos dirigimos al mercado de ropa y textiles, donde vemos a niños pequeños trabajando con máquinas de coser manuales. Las telas de colores nos envuelven y compramos algún mantel pintado a mano. 

Salimos del mercado y volvemos al hotel. Descansamos, cenamos tranquilos y antes de irnos a la cama, salvamos a un cangrejo que se había perdido por el hotel. Cerramos el día en la playa, pensando ya en el día siguiente.

CRÓNICA VIAJE SENEGAL – DÍA 3 

Nos despertamos temprano y hacemos una visita rápida a la playa que está a pocos metros del hotel. Había muchos chicos jóvenes haciendo diferentes actividades físicas. Desayunamos rápido, preparamos las mochilas y vamos a la Poupounière.

Por grupos, las cuidadoras del centro nos asignan diferentes tareas. Algunos de nosotros vamos con los recién nacidos, las condiciones son muy duras y tenemos que retener alguna que otra lágrima. Hay que cambiar pañales y dar de comer a muchos niños que piden a llantos un poco de atención. Con niños y niñas más mayores las tareas son otras, hay que comprenderles, jugar, bailar y dibujar. Juan tuvo su reencuentro con “Manolo” que por fin tenía una silla de ruedas;  estuvo con nosotros en todo momento, con una gran sonrisa en la cara. Esta laboriosa tarea acabó a las 12:00.

Después de despedirnos de los chicos del orfanato, nos dirigimos al pueblo de Louly, casa de nuestro confidente N’Cour. Con la ayuda de las mujeres locales preparamos 4 kilos de spaghetti mientras que el resto del pueblo se congregó delante de la casa para acogernos y hacer un aperitivo. Les entregamos material de fútbol y bailamos junto a los locales siempre compartiendo un fuerte sentido de respeto mutuo que no nos impedía disfrutar del momento. Finalmente, después de 2 horas de cocina rudimentaria pero sorprendentemente eficaz, compartimos la comida con todo el pueblo. El sentimiento de felicidad predominaba entre los habitantes del pequeño pueblo, disfrutando de cada bocado como si fuese el último. Todos estaban agradecidos por tener agua y algo que llevarse a la boca.

Una vez en el autobús, fuimos realmente conscientes de lo que acabábamos de vivir. Muy pocas personas han podido descubrir la vida cotidiana de un pequeño pueblo en el país africano; vivimos el día a día de la gente, su realidad y eso nos impactó muchísimo. Nos sentíamos tremendamente agradecidos por la oportunidad que se nos estaba brindando y por la hospitalidad y humildad que nos mostraron en todo momento.

Tras esta experiencia, que no olvidaremos nunca, realizamos una actividad más turística. Visitamos la Île des Coquillages, junto a nuestro guía Mathieu. Es una isla cuya base es una concha marina, la marea sube y baja cada seis horas y los locales aprovechan para jugar a fútbol y para recoger alimento marítimo en las horas en que el nivel del mar está más bajo. Descubrimos un pueblo en el que conviven pacíficamente la religión musulmana y la cristiana, callejeamos por el pueblo, disfrutamos de su paz, vimos el gran baobab, con una gran historia detrás y visitamos el famoso cementerio de la isla. Un lugar en el que los seguidores de ambas religiones conviven pacíficamente pero siempre respetando las creencias de los demás. Hicimos alguna que otra compra intentando regatear al máximo, como es costumbre en el país. No nos fuimos del lugar, sin antes jugar una corta pero intensa partida al futbolín con algunos niños.

Ya de vuelta al hotel, nos duchamos y descansamos tranquilamente, cenamos y charlamos un buen rato para luego dormir y reponer fuerzas para el nuevo día.

CRÓNICA VIAJE SENEGAL – DÍA 4

Después del intenso día anterior, nos despertamos y desayunamos rápidamente para salir a las 8:45 rumbo a Dakar.

Nos dirigimos a la escuela internacional de Dakar donde nos esperan para realizar una visita a las excelentes instalaciones del centro. Nada más llegar nos damos cuenta del contraste con todo lo visto anteriormente. 

Al salir, vemos, a pocos metros del centro escolar,a vendedores ambulantes, lo que nos da idea  de los niveles de desigualdad en el país. De regreso, hacemos una rápida parada en el  Monumento Nacional (sorprendente por su gran tamaño)

Por la tarde, volvemos a visitar el pueblo de Louly, donde nos invitan a participar en un partido amistoso de fútbol. El sol abrasador y la amabilidad de los jugadores hizo del breve encuentro una gran experiencia. Únicamente participaban los hombres, por lo que decidimos organizar juegos de balón con el grupo de chicas del poblado. 

Después del esfuerzo físico, llega el momento de la despedida, con bailes y muchas fotos grupales. Llegamos a las 8:00 al hotel para acabar nuestro día.

CRÓNICA VIAJE SENEGAL – DÍA 5

Último de día de nuestra increíble e inolvidable aventura.  Nos levantamos, desayunamos y preparamos nuestras mochilas para hacer entrega de las llaves del hotel y despedirnos del personal. 

Repetimos los pasos del día anterior y nos dirigimos a Dakar por la mañana. Esta vez nos toca visitar la isla Gore, conocida por ser la isla de los esclavos. Fue el punto de partida de todos los esclavos africanos durante siglos. Cogemos un ferry y llegamos a un pueblo muy pintoresco, estaba abarrotado de turistas y de puestos de venta de productos. No nos vamos sin visitar la casa de los esclavos, un lugar con una triste historia, en el que pervive la muerte de miles de inocentes. Cogemos el ferry de vuelta y nos subimos al autobús por última vez.

El camino hacia el aeropuerto es muy emotivo, N’Cour lee una carta de agradecimiento y acabamos todos con lágrimas en los ojos. 

Llegamos al aeropuerto. Jugamos a las cartas y, antes de subirnos al avión, realizamos una charla grupal reflexionando sobre las experiencias vividas durante  esta última semana. 

Nuestro sincero agradecimiento  a todos los que han hecho posible las imborrables vivencias de estos días . Somos algo más conscientes de  que no todo es lo que parece y de que, para entender la situación de países como Senegal, es necesario estar allí. Las palabras no siempre pueden reflejar la realidad en todos sus ámbitos.

¡Muchas gracias a todos por vuestro apoyo!